02/07/18 – COMPLACIENDO a su fanaticada, tras su exitosa su primera presentación el pasado mes de junio, subió el telón para la segunda función del concierto “India Trayectoria” que tuvo lugar ayer domingo 1ro de julio, en la Sala de Festivales del Centro de Bellas Artes.
“India Trayectoria” inició con una proyección de la exponente del género salsa, en la que se podía apreciar junto a figuras como Celia Cruz y Tito Puente. Ya en vivo y en el centro del escenario, la artista dio comienzo a sus interpretaciones con temas en inglés: “Dancing With Fire” y el sensual “Fire”, un clásico musical, en el que se percibía un concierto hecho con el corazón.
En esta primera parte, prosiguió con “Qué Ganas De No Verte Nunca Más” y “Ese Hombre”.
“Los amo”, dijo en medio de “Sedúceme”, corta expresión que entusiasmó a la audiencia que ya estaba animada.
Y mientras cantaba, avisaba que Manny Manuel se encontraba en el lugar, invitándolo al escenario. El público disfrutó a carcajadas de la improvisada participación, el “enamoramiento” y la picardía entre ella y su primer invitado, además del provocativo “perreo” que la vocalista le hiciera al Rey de Corazones.
Más adelante, también fue bien recibida la anunciada entrada de Glenn Monroig a tarima para interpretar “Vivir Lo Nuestro”. El dúo hizo suyo el tema grabado anteriormente con Marc Anthony, y que previo a ellos, el cantante Basilio diera a conocer en versión de balada.
Durante todo el concierto India mostró su agradecimiento a Dios, a los fanáticos por su apoyo, a todo Puerto Rico, y asimismo a la Prensa, medio del cual expresó con naturalidad que “todos los artistas la necesitan”.
Casi de inmediato la cantante subrayó con voz alentadora que “no hay huracán que nos tumbe el alma… ¡Puerto Rico los amo muchísimo!”.
En cada interludio, para hacer un cambio de vestuario, la orquesta dirigida musicalmente por el pianista, Isidro Infante, tocaba algún ritmo, mientras el grupo de baile de la academia de Tito Ortos, danzaba las melodías.
Fue curioso dentro del espectáculo el espacio para la interpretación del tango, que tuvo músicos de ese género, iniciando con “La Comparsita”, nacido en 1915 y considerado el más difundido mundialmente y, ahora, reconocido como un himno popular de Uruguay. Asimismo, formó parte, “Silueta Porteña”. La salsera, entretanto, cantaba “Qué Te Pedí”, y participó en la danza argentina junto a bailarines, cautivando a los asistentes.
Ya para ese entonces, lucía un vestido azul marino, distinto al primero: un traje colorido de amplias mangas y con menos formalidad que los siguientes, que dejaba expuesto su tatuaje en una de sus piernas. Su calzado era deslumbrante, digno de una majestad. También llevó suelta su larga cabellera negra, marcada con ligeras ondas.
La Realeza llega a Bellas Artes
La Princesa de la Salsa, así conocida artísticamente, fue muy aplaudida durante el evento, pues sus notas altas y sostenidas al cantar causan admiración. Ejemplo de esto fue “Sola”, de los más célebres de la noche, al igual que “Estúpida”.
Antes de interpretar este número, por cierto, solicitó a la audiencia no permitir actos de violencia doméstica, de lo cual fue víctima en un momento de su vida, situación con la que sufrieron mucho sus padres y de la cual se liberó “porque no era mi momento y Dios me protegió”, según manifestó la artista.
En “Trayectoria”, Linda, su nombre de pila, impartió a cada canción su estilo, siendo la interpretación de “Me Cansé De Ser La Otra”, “O Ella O Yo” y “Dicen Que Soy”, en las cuales su alto registro se pudo apreciar con suma comodidad.
Pero no solo su gran alcance vocal, sino igualmente su carisma y simpatía contribuyeron a un ambiente alegre, que motivó interactividad con el público. Tanto así, que una pareja se comprometió en medio del espectáculo, causando emotividad y sorpresa a todos.
Como parte del evento, mediante vídeos, se presentó la fenecida estrella mexicana, Juan Gabriel, “Divo de Juárez”, reconociendo éste el talento de la India, a quien se refirió como “La Diosa De La Salsa”. Y desde sus comienzos le auguró mucho éxito en su carrera.
Ella, por su parte, con “Ahora Que Te Vas”, “Fue Un Placer Conocerte”, “Gracias a Dios”, rindió tributo al cantante y compositor, a quien le unía una gran amistad. Y en otro tema de su autoría, “Costumbres”, la solista se hizo acompañar del público.
Faltaban tres canciones para completar la compilaciééón de la noche… y entre éstas, “Rumba”, que fue la más cadenciosa. Por ello, ante una sonora descarga musical del tema, la vocalista vociferó:
“¡Mi salsa pa’ los Cocolos! Los mejores músicos del planeta Tierra, están aquí en Borinquen. ¡Puerto Rico lo hace mejor!”, aseguró su “princesa” conceptuando a los diez músicos y tres coristas de la orquesta como “los monstruos de la salsa”. La respuesta fue una inmediata calurosa ovación.
“La Gran Tirana”, canción que popularizó La Lupe en sus tiempos, fue el preámbulo para concluir la velada. Nuevamente India expuso para el deleite de su fanaticada la merced de su voz, que estima es un don de Dios.
“Los amo. ¡Qué bien se siente ser boricua!”, proclamó La Princesa de la Salsa, quien incluyó letras de amor y desamor y de esas de superación que dicen basta al sufrimiento por amar.
Después de dos horas y media, disfrutando entre salsa, balada, tango y un poco de “perreo”, finalizó “India Trayectoria”, su recopilación musical de tres décadas, con la interpretación de uno de sus tantos éxitos de siempre. Y con “Mi Mayor Venganza”, vocalizó el tema con el que, sin dudas, su alteza demostró que llegó a Bellas Artes para quedarse. Y al caer el telón, algunos fanáticos salieron entonando el impetuoso coro de la canción, hasta la salida del vestíbulo.
Por Ana H. Peña
(Cámara: Ángel Negrón)