07/11/2018 – “LA verdad es que los dos dimos todo, especialmente en esa final, que nos la vivimos a máximo. En casi cuatro meses pasamos hambre, cansancio y muchísimas otras cosas… A Kenny lo respeto mucho como persona, para mí debió ganar un hombre y una mujer. Los dos debimos ganar y por lo tanto me gustaría darle $25,000.00. El dinero va y viene, yo estoy feliz de poder compartirlo con Kenny”, revela campante la gimnasta olímpica Marisela “Chelly” Cantú a Helda Hoy, ganadora de Exatlón Estados Unidos, acompañada del subcampeón de la competencia, el soldado Kenny Ochoa: ambos por primera vez de visita en Puerto Rico.
La joven mexicana obtuvo $200, 000.00 al coronarse como vencedora en el reality, además de ser la primera mujer triunfadora en la historia de Exatlón.
Chelly y Kenny celebran la victoria de haber llegado hasta la final del programa, y a su vez detallan las vicisitudes que vivieron para lograr grabar dicho episodio. Al igual que el gimnasta boricua Tommy Ramos, el guatemalteco se enfermó con salmonella en las tierras de República Dominicana.
“Yo ya no podía tomar agua, estaba súper mareado y deshidratado. Entonces, con el sol comencé a vomitar todo. Me pusieron suero, me empezó a doler el estómago hasta que me doblaba por los cólicos tan fuertes, me tuvieron que llevar al hospital y atrasar todo”, relata el militar de 23 años, perteneciente a la armada de los Estados Unidos.
Kenny logró competir en la semifinal, aunque su salud no se encontraba en óptima condición e, incluso, luego su condición empeoró. Con este escenario, la producción le otorgo diez días de descanso para recuperarse y entrenar para el último capítulo.
“Realmente no sabemos qué fue lo que pasó y no entiendo por qué yo no me enfermé. No sé si haya sido una comida especifica que a lo mejor comí poquito o un plato que estaba contaminado y el otro no. Sí hubo un día en el que me sentía mal, pero no me enfermé así. Por ejemplo, Tommy siempre comía solo proteína y carbohidrato, entonces creo que eso también influye, nos baja las defensas. Al que más fuerte le dio fue a Tommy, quien el traía más cansancio que ninguno, pues nunca descansó”, cuenta la exatlonera de 28 años que revela que además gran parte de la producción contrajo la mencionada bacteria.
Antes de llegar a Exatlón, Chelly daba clases de gimnasia y estudiaba mercadeo en Monterrey, México. De igual manera, Kenny también estudiaba, es soldado y trabajaba en un rancho en Los Ángeles, California. Hoy día entre sus planes se encuentran invertir el capital obtenido.
“Nunca en mi vida había tenido tanto dinero (Kenny gana 29,000.00 de tablero del dinero, más $25,000.00 que Chely le concede). Hay que gastar dinero para hacer dinero, voy a buscar la manera, todavía no sé, pero la idea es invertirlo, hacer lo que me gusta y al mismo tiempo ayudar a la gente”, especifica.
Por su parte, Chelly se mantiene enfocada en la idea de crear un gimnasio para desarrollar gimnastas. Así mismo, al igual que Kenny, cederá una parte del monto a su hermana, quien practica la fe cristiana, para que esta pueda ayudar a los necesitados en o fuera de la iglesia.
Por Janice Arroyo
Fotos Carlos Pagán Mediavilla
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