29/11/15 – UNO llegó “A Pedir Su Mano”, a lo que el otro respondió: “Esto Es Vida”… Antes de que ella, a su vez, confesara que “Quiero Que Me Hagas El Amor”. Se trató de la tríada de ensueño que se apoderó del escenario del Coliseo de Puerto Rico anoche, durante la cuarta entrega del “KQ Live Concert”. El recital de esta emisora que se presenta anualmente conto en esta ocasión con la participación de Juan Luis Guerra, Draco Rosa y Ednita Nazario.
Juan Luis Guerra arribó a la tarima a un cuarto de hora para las nueve de la noche, equipado por “La Travesía” y “Como Yo”. La inigualable sabrosura del creador de “Ojalá Que Llueva Café” se puso de relieve ante una audiencia entusiasta que coreó la totalidad de sus temas, aderezados por proyecciones de escenarios, flora y frutas tropicales en cuatro pantallas.
“¿Cómo la están pasando?”, saludó el dominicano, posiblemente conociendo de antemano la obvia respuesta: ¡espectacular!
Acto seguido, el cantautor presentó una de las melodías que integrarán su próxima grabación discográfica. La calurosísima respuesta a “Todo Tiene Su Hora” resultó algo inusual, tratándose de una canción relativamente nueva. La concurrencia no sólo la disfrutó sino que decidió convertir los pocos espacios libres de las instalaciones del Choli, en una gran pista de merengue.
“La Bilirrubina” representó el momento climático de la presentación de Guerra, pues ya los pocos asistentes que quedaban sentados decidieron que había que mover el esqueleto. El insigne músico se despidió para regresar con un gran encore, encabezado por la hermosa “A “Pedir Su Mano”, a la que siguió “Las Avispas”. Y la ovación de pie no se hizo esperar.
Indudablemente, Juan Luis dejó al público tan animado que menuda tarea correspondería al artista que le siguiera. Tras un breve saludo de la anfitriona Desirée Lowry, el concierto prosiguió fluidamente con un saludo grabado de Ricky Martin. El querendón boricua identificó al siguiente intérprete como alguien de un inigualable talento que “regresó para ocupar sus corazones…el número 1: ¡Draco!”.
“Casi Un Bolero” y “Cómo Me Acuerdo” fueron las selecciones musicales que precedieron al saludo en el que Robi Draco Rosa instó a “aprovechar las oportunidades”. (“Les doy las gracias a la emisora (KQ 105) por ser parte de mí. Es lindo contar con ese apoyo. Larga vida, seguimos…”, dijo).
“El Tiempo Va” y “Blanca Mujer” se destacaron tanto por el filin de este artista como por las intervenciones de los instrumentos de cuerdas: cuatro, bajo y cello. Los seguidores de Robi corearon sus canciones y estuvieron atentos a sus explicaciones sobre su proceso musical. Confesó que amaba el rock n’ roll pero abogó por nuevas versiones de sus emblemáticos temas. Su interpretación a cargo de la banda le proporcionó la oportunidad de laborar con “estos músicos increíbles”. (“A veces da trabajo acudir a un concierto y tocar las piezas como están en los discos. Algunos fanáticos se me acercan y me preguntan: <<¿por qué no la cantaste como está en la grabación?>>. Y es que yo tengo una filosofía: la repetición es aburrida. Eso sirve para cuando estás en el colegio. Sería un crimen tocar las canciones del mismo modo siempre. Lo importante es lo esencial. ¿Ustedes me entienden?”, cuestionó a los espectadores).
Luego de volver a destacar el apoyo a la difusión de su música por parte de KQ 105, confesó que para cualquier artista es muy emocionante escuchar sus canciones en la radio.
“Es un privilegio”, agregó.
A esta alocución siguió “Penélope”, que marcó uno de los mejores momentos para este artista. Pero posiblemente su intervención más emotiva se produjo al entonar “Esto Es Vida”. La oferta musical de Draco finalizó por todo lo alto, con un arreglo repleto de toques nacionales, gracias a los visuales de la campiña boricua que mostraron las pantallas y los inconfundibles acordes del cuatro puertorriqueño durante “Más y Más”.
Un vídeo del cantautor Tommy Torres dio paso a la presentación de la diva Ednita Nazario. Ríos de tinta han sido dedicados a destacar las habilidades vocales y la presencia escénica de la ponceña. La velada del sábado no fue la excepción. No obstante, cabe señalar que particularmente sus canciones de despecho (que no son pocas), la han convertido en una especie de paladina de la justicia, en clave de relaciones amorosas desde una óptica femenina.
Así pues, luego de una introducción instrumental, su “Vengada” fue recibida como una suerte de himno, por casi la totalidad de las mujeres que poblaron el coliseo. Éstas no sólo coreaban la melodía sino que se involucraban en una especie de particular pantomima, nutrida de gestos de condena al ser (imaginario o real) que las había agraviado, junto a señales de apoyo hacia quien luego pasó a interpretar un popurrí de “Te Quedarás Hundido” y “Sobrevivo”.
Pero posiblemente la mayor reacción hasta ese instante, se gestó a partir de “Para El Peor Amante” cuando gran parte del sector masculino cantaba con cierta timidez, frente a elocuentes féminas que acompañaban a la voz impecable de Ednita Nazario.
“Muchas gracias a ustedes y al Choliseo, porque llegamos aquí a compartir una noche de amor. Vamos a escribir juntos otra noche inolvidable. Puerto Rico es la cuna de pasión. Somos intensitos y qué mejor que tener una noche como la de hoy, en la que nos une el amor por la Isla, por la música, por ustedes y por la pasión. Espero que la pasen brutal”, señaló esta experta del dominio escénico.
Cantó entonces “Confesados” antes de emprenderla con un medley de “Empezar A Vivir” y “Lloviendo Flores”. Ésta última fue recibida con estruendosos aplausos y un entusiasmo desbordante. Luego cantó “La Más Fuerte”, coreada igualmente por legiones de femeninas que encontraron en la melodía el mejor vehículo para expresar lo que aparentemente sentían, seguido de una versión bien caribeña de “Tres Deseos”. El tema que trata del genio liberado de su lámpara maravillosa, contó con un cuerpo de cuatro bailarinas que aderezaron la acertada presentación.
La vocalista pasó entonces a explicar que una vez más en su carrera, sufrió “el dolor de cabeza más hermoso”. (“Se trata de seleccionar las canciones que van a formar parte de un concierto. En esta ocasión, somos tres artistas, no podíamos contar con una participación demasiado larga. Además, esto de escoger repertorio es como (sucede con) los partidos políticos: que siempre quedan los inconformes. Bueno, pues sometí mi lista y faltaba una canción. Ya la he cantado muchísimo, pero prefiero repetirme… a que me pelen en las redes sociales otra vez”, declaró).
Con estas palabras, dio pie a la interpretación de una de sus melodías más favorecidas y representativas: “Quiero Que Me Hagas El Amor”. Con la sensualidad que acostumbra presentar cuando la entona, Ednita llevó a la concurrencia a los más altos confines de la emoción. Y puede sentirse orgullosa, porque contó con un Choliseo repleto, a modo de coro. Esta melodía marcó el pseudo final de la velada, pues regresó al escenario para elogiar al compositor “del que me siento orgullosa, con quien he compartido en las buenas y en las difíciles, quien se entrega cada día y vive agradecido”. (“Quiero agradecerle a este músico que me haya dado una canción que aún se encuentra en el corazón y la memoria de todos: de Draco, <<Más Grande Que Grand>>”, presentó).
Durante ésta, una de las mejores interpretaciones de la noche, se proyectaron fotos de Draco. El encuentro cerró con la ñapa de “Eras Uno Más”.
El concierto “KQ Live Concert” dejó a la concurrencia enardecida… preparada y genuinamente entusiasmada, para el recital venidero. Habrá que esperar, con las más altas expectativas.
Por Nancy Piñero Vega
(Fotos: Cheery Viruet)