9/4/15 – COMO suele suceder, Papo Brenes echó mano a su sentido del humor, aunque con algunos momentos de seriedad, para anunciar públicamente que ha sido diagnosticado con un agresivo y avanzado cáncer en el páncreas. Sagaz, tierno, charlatán, vertical, callejero y elegante al mismo tiempo, el panelista de “Dando Candela” conmovió hoy sorpresivamente a la teleaudiencia con esta revelación.
El rumor de su delicada condición de salud avanzó vertiginosamente en la última semana. Ello promovió que el mismo veterano periodista de entretenimiento y farándula se plantara estoicamente frente a las cámaras en el estudio de televisión de “Dando Candela” en Telemundo para explicar este nuevo drama habido en su enriquecedora existencia como reportero, amigo, padre, colega, amigo y confidente.
Sus primeras palabras, flanqueado por sus compañeros panelistas, fueron en pie de lucha con asombrosa serenidad. De hecho, nadie hubiese imaginado que al final de su recuento sobre los síntomas de salud que había enfrentado, fueran tan devastadores.
“Se ha estado especulando por mi estado de salud porque he perdido unas libritas, y todo se debe a un deterioro de salud. Hace mes y medio empecé a sentir dolores en el cuerpo y unas sensaciones extrañas en el abdomen y en las costillas y comencé a minimizar los ejercicios y no paraba eso. Me tuve que hacer unas pruebas médicas y todas las pruebas salieron bien y luego me hicieron unas pruebas porque los dolores se agudizaban y apareció un tumor maligno canceroso bastante avanzado y está bastante adelantado”, declaró Papo, con 25 libras perdidas, en el último segmento del programa.
La emergencia, por supuesto, ha ameritado que Papo se haya ausentado al programa para responder a sus citas y diversos procedimientos médicos que requieren tiempo y energías.
Explicó que además de haber tenido que comenzar a realizar cambios drásticos en su vida, agradece al excelente equipo médico que lo asiste. Igualmente al apoyo emocional que recibe de sus dos hijos varones, de su hija y de su compañera sentimental.
Indicó que ayer, por ejemplo, se sometió a una prueba nuclear. De camino a la oficina se debilitó de tal manera, que tuvo que regresar a su casa.
Por último, en medio de este emotivo momento que provocó lágrimas entre sus compañeros, Papo enfatizó en que hace 13 años – estando en el programa “Anda Pa’l Cara” – le ganó la batalla al cáncer de próstata y por lo tanto, “estoy listo para noquear la enfermedad por segunda vez”.
De hecho, se llevó las manos al cuello para mostrar el rosario que le regaló Raymond Arrieta utilizado durante sus caminatas. Ahora, ante un camino tenebroso y difícil, a un proceso de quimio y radioterapias, dice enfrentarlo en actitud esperanzadora y seguro de que “yo lo puedo bregar”.
Por Helda Ribera-Chevremont
(Amiga y colega, old school)